Las consecuencias de una relación tóxica: crimen de la colonia Estación
Antes de que llegara la policía, la mujer habría lavado los cuchillos, limpiado el piso de la cocina y del baño tratando de borrar toda mancha de sangre para que la muerte de su esposo parecería un accidente.
Esta es la versión que los padres y la hermana de Osvaldo de 29 años de edad, creen, por las evidencias encontradas por la policía.
Rosa Gómez Bautista, madre del hombre que trabajaba en un negocio donde arreglan climas, entrevistada antes de la audiencia de vinculación a proceso de Juana I, ésta le habló a las 3 de la mañana para decirle que su hijo estaba muerto, ella salió porque viven en la misma calle y encontró el cadáver de Osvaldo.
Interrogó a su nuera para preguntarle qué era lo que había pasado, pero sólo hubo silencio. A la madre no le cuadraban las cosas, su hijo estaba con un short, lo que indicaba que ya había estado en la casa y que no venía de la calle.
Así que le pidió a los policías que buscaran el pantalón del hombre en la casa, pero Juana les habría dicho que no tenía las llaves de la puerta, que estaba con candado, luego cambió la versión y mencionó que las llaves estaban en el lavadero. No aparecieron. Un elemento de la Policía Investigación se asomó por una ventana y vio que algo andaba mal, ahí comenzaron las sospechas.
La hermana del occiso relató, que de acuerdo a la información con la que ya cuentan las autoridades, el hombre presentaba tres heridas de arma blanca en el pecho, pues una habría dado en una arteria, pero al cuerpo no se le observaba sangre, a simple vista sólo un golpe en la cabeza.
No entienden por qué, pero presumen que la mujer limpió todo tratando de no dejar evidencias para hacer que todo pareciera un accidente, incluso ellos creyeron que Osvalado se golpeó con una piedra que estaba cerca de donde encontraron el cuerpo. Aseguran que ella es culpable por el homicidio y pidieron todo el peso de la ley.
Violencia-relación tóxica
Rosa dijo que Osvaldo y Juana tenían una relación “tóxica”, los dos tomaban alcohol y ya bajo los efectos, la mujer habría ejercido violencia en múltiples ocasiones, “un día se peleaban por cualquier cosa y al día siguiente estaban contentos”, pero aseguran que era ella quien lo golpeaba, sin embargo nunca hubo ningún antecedente de violencia ante las autoridades, salvo un conocimiento en el DIF, en el que los padres manifestaron el interés de quedarse con los niños al ver que la pareja andaba tomando por la madruga y traían a los menores, pero todo quedó ahí.